Cenicientes del carbón

«Cenicientes del carbón»

Puñales se clavaban bajo su garganta
Y no dijo nada. Con miedo, con rabia
y con sangre a la espalda

Y no dijo nada Yo tenía fe…
Puñales que se clavan bajo mi garganta
Y no sale nada,
Ni sangre, ni rabia, ni polvo de escarcha.
¡No sale nada!
Se cierra la puerta ante tu mirada,

Yo busco el remedio y ni media palabra.
¡No diré nada! ¡No diré nada! ¡No!
…Y criada entre la rama,
Soy nacida a pie de monte Y criada..
Y allí estaban ellas poniendo la cara:
“Aquí entramos todos o no entra ni un alma”
“¡Todas a una! ¡Todas o ninguna!”
¡Que me lleven presa y que vuelva rapada!
No busco consuelo, ¡ni media palabra!
Nadie nos para, nadie nos para, ¡no!
…Y criada entre la rama,
Soy nacida a pie de monte Y criada..

Y echo en falta ente los cuentos,
Cenicientes del carbón,
En madreñes y alpargates
Y a la llucha col tacón.
Yo tenía fe, por ellas yo tenía fe.
Yo tenía fe, por ellas yo tenía fe.

Trai, trai, trai, tráimela equí trai,
trai, trai, trai, tráimela equí trai, trai,
trai, trai, tráimela equí trai,
trai, trai, trai, tráimela.