En el mes de septiembre utilizamos unas patatas de nuestro huerto para hacer una rica ensaladilla rusa. Las patatas nos dan mucha energía. Nuestras patatas son ecológicas, no hicimos daño a la naturaleza con pesticidas.
Cuando acabamos de comer la ensaladilla rusa tiramos la piel de las patatas y otros desechos de comida a la compostadora para que la tierra nos de más alimentos.